Minimizar costos, establecer objetivos realistas y reevaluar proveedores son algunas de las sugerencias.
Los propietarios de la carga (BCOs) y los expedidores que ahora planean sus licitaciones de carga marítima para 2024 sin duda esperarán obtener tarifas más bajas y, al mismo tiempo, la capacidad requerida en un nivel aceptable de servicio de transporte.
Pero ¿cuáles son las herramientas y “otras áreas” en las que puede haber margen para mejorar los resultados de las licitaciones y reducir el riesgo?
1) Minimizar otros tipos de costos:
De acuerdo con un artículo publicado en Journal of Commerce, además de reducir las tarifas marítimas básicas, ahora será más importante reducir «otros costos», en particular los costos administrativos de logística (como el costo de gestionar el transporte marítimo y aéreo), los costos de detención y demurrage (que a menudo implican millones de dólares para los medianos y grandes expedidores), las regulaciones de emisiones o los nuevos recargos denominados ‘ETS’ en las rutas europeas, entre otros.
Por lo tanto, los «otros costos» a los que apuntar además de las tarifas marítimas básicas incluyen:
- Costos de administración de logística.
- Costos de detención y demurrage.
- Regulaciones de emisiones / Recargos “ETS”.
2) Establecer tarifas objetivo realistas:
JOC recomienda utilizar proveedores de evaluación comparativa para informar a los postores qué tarifas esperar, aumentar la presión competitiva y tener confianza en lo que realmente puede negociar.
3) Reevaluar la base de proveedores:
Esto es importante no sólo para minimizar costos, sino también para obtener un mayor nivel de calidad del servicio y garantizar operaciones logísticas estables y predecibles.
4) Uso de una herramienta avanzada e integrada de licitación y evaluación comparativa.
Ahora se están utilizando ahora herramientas de oferta avanzadas, de bajo costo, generalmente basadas en la nube y en gran medida automatizadas, que brindan análisis rápidos.
5) Tomar decisiones de planificación basadas en el conocimiento.
Con la oferta y la demanda ponderadas a favor de los expedidores, los eventos geopolíticos y climáticos, los cambios regulatorios a mediano plazo y las negociaciones laborales de varios años que causan huelgas portuarias tendrán un impacto más significativo en las cadenas de suministro.